Considerada una de las obras más destacadas de la litografía mexicana del siglo XIX. Contiene 48 cromolitografías que retratan varios monumentos, paisajes, edificios y escenas de la vida cotidiana en la Ciudad de México de la época. Además de su riqueza visual, incluye descripciones de los sitios y escenas representados, escritas por intelectuales como Marcos Arronis, José T. de Cuellar, Franciso Gonzalez Bocanegra.